La decoración floral para una boda no es siempre una tarea fácil. Sin embargo, es una de las primeras decisiones a tomar en el proceso de organización.

Desde la misma entrada del lugar de celebración hasta la decoración de las mesas, pasando por la ceremonia, armonizan el ambiente que se respira ese día tan especial creando un equilibrio.

Se trata de transmitir también con el lenguaje de las flores y ser capaz de despertar sentimientos y emociones en un día en el que ambas cosas están a flor de piel.

Para elegir correctamente hay que tener en cuenta una serie de factores como, el estilo de la boda (incluso el vestido de la novia), el lugar escogido, el espacio a decorar, si es interior o exterior, el mobiliario disponible, etc.

Los colores, las texturas, las posibles combinaciones también influyen a la hora de preparar la decoración floral.

Es importante resaltar que la tendencia más importante en la actualidad es la personalización con un compromiso ético y sostenible.

Todo ello ofrece un abanico de posibilidades en el que cada vez más parejas optan por remitirse a la naturaleza que rodea al espacio de la celebración integrándose en ella.

Algo que se consigue imbuyéndose de las características del lugar, y creando un ambiente que integre todo, naturaleza y decoración, de forma que terminen siendo un conjunto elegante y armonioso.

Creando una atmósfera que reafirme la vitalidad de un día especial, en el que plasmemos la personalidad de los novios, su acento personal y único como protagonistas indiscutibles del evento.

Las decoración floral pueden y deben estar presentes en cada uno de los momentos.

En la invitación, en forma de detalle, anudadas alrededor de la misma con un lazo ofreciendo una primera pincelada de nuestro amor por la naturaleza.

El Ramo de Novia, opta por la originalidad y apuesta por uno que refleje tu forma de ser.

Y también para ellos, con flores en la solapa en línea con el estilo escogido.

Una vez en el lugar, desde la misma puerta de entrada al lugar, se ofrecen las primeras pinceladas de decoración floral integradora. Como ejemplo os traemos las imágenes de la boda que organizaron en nuestra hacienda las wedding planner de Sevilla de Fiesta y que contaron con la colaboración de Adela Pérez de Guzmán.

Decora con flores la ceremonia y también el espacio de los invitados como una forma perfecta de redondear la puesta en escena.

Pasamos a la celebración, y el Seating juega un importante papel de apertura dónde las decoración floral debe continuar con la misma línea argumental que hayamos escogido para ofrecer una sensación de continuidad.

Y llegamos a las mesas, la realización de los centros ofrecen un momento ideal para la creatividad. Son el punto neurálgico de la celebración y dónde tanto novios como invitados van a estar durante bastante tiempo, de forma que es muy importante que ofrezcan la vistosidad y belleza que deseemos aportar a la celebración.

Las flores y otros ornamentos relacionados son siempre imprescindibles en una boda, juega con ellas de forma que conviertas cualquier espacio en vuestro lugar ideal.